Si lo piensas un poco, te das cuenta que todo lo agobiante de un negocio está relacionado con la pasta
Si te llegan pocos clientes.
Si los que te llegan, pagan poco.
Si no te puedes permitir contratar equipo.
Si necesitas herramientas de pago y te descuadra el presupuesto.
Si los impuestos te pegan un puñetazo en el estómago cada 3 meses.
etc etc etc…
Para superar este trance, la anticipación es fundamental. Porque cuando tienes el money controlado, los baches no te hacen tanto daño
Hoy te voy a contar 5 estrategias, que puedes empezar a poner en práctica ya, para que tus finanzas no te taladren la mente cuando intentas dormir a las 2’30 de la madrugada
Vamos con nuestro café & charla
1) Blinda tu fondo de emergencia.
Que síiiiiii, que lo he dicho mil veceeeeesss…. ya lo sé.
Pero es que si no tienes un colchón adecuado para posibles imprevistos, es lo primerito que tienes que resolver.
Para calcular la cifra adecuada para ti habría que tener en cuenta varios factores. Pero a grandes rasgos, deberías reservar entre 3 y 6 meses de la suma de tus gastos si:
- No tienes personas a tu cargo (hijos, padres mayores…).
- Si tu negocio va bien y está consolidado.
- Si en casa sois 2 personas con un buen sueldo.
Y plantéate guardar como fondo de emergencia entre 6 y 12 meses de gastos si:
- Tienes personas a tu cargo.
- Tu negocio es una montaña rusa.
- Tu familia depende solo de tus ingresos o los ingresos de ambos son irregulares.
Básicamente, lo que hago con mis clientes para llegar a la cifra adecuada es evaluar su tolerancia al riesgo y marcar un ahorro objetivo que les dará tranquilidad.
¿Y dónde lo guardas?
En una cuenta remunerada o (parte) en un depósito a muy corto plazo.
2) Reduce deudas.
Si tienes alguna deuda pequeña, de esas que se van pagando fraccionadas, cancélala en cuanto puedas.
Así tendrás cada mes un poco más de flujo de caja a tu disposición.
Y con flujo de caja adicional, puedes:
Invertir (sí, aunque sea poquito).
Destinarlo a cancelar otras deudas para aumentar aún más el flujo de caja.
Reforzar el fondo de emergencia.
Y sin mencionar lo bien que se vive sin deudas
3) Diversifica ingresos.
No me voy a enrollar ahora con este tema, porque me reservo las ideas para hablar de cartera de productos y servicios.
Pero toma nota mental de que sería genial tener (al menos) 3 fuentes de ingresos distintas.
4) Optimiza gastos.
Este es un ejercicio que deberías hacer una vez al año independientemente de si tus finanzas van bien o no.
Te da claridad.
Te ayuda a decidir.
Idealmente tienes que saber qué cifra de gastos necesarios tienes de media mensual. (Esos gastos imposibles de eliminar).
Y también la media de gastos superfluos. (Los que son opcionales y sí podrías prescindir de ellos).
A partir de ese punto comienza la estrategia de optimización.
5) Invierte en ti.
Esto puede parecer contradictorio ¿no?
Pero piensa una cosa…
A los buenos profesionales, valiosos, bien formados y preparados, y con una buena red de contactos, nunca les va mal.
Les llegan clientes constantemente.
El boca-oreja les funciona perfect.
Tienen buenas referencias y testimonios.
Se pueden permitir tarifas más altas, porque son los mejores.
No escatimes en ti.
Desde que la formación digital está al alcance de cualquiera con solo un clic, no tenemos excusa
¿Cuál de estas 5 ideas vas a poner en práctica ya para tejer tu red de seguridad financiera?
Cuéntame Un abrazo!