Obligaciones tributarias de los autónomos que vendan online bajo el modelo de dropshipping

En esta guía de Declarando, se detallan los pasos administrativos necesarios y las obligaciones con Hacienda que un autónomo debe observar cuando decide desarrollar en internet la actividad de dropshipping.

Se trata de una modalidad de comercio electrónico en la que un trabajador autónomo ofrece la venta de un catálogo de productos que ni produce ni almacena él mismo, sino que actúa de intermediario con un proveedor, que es quien embala y distribuye los bienes.

En los últimos años, las nuevas herramientas digitales han propiciado la aparición de innumerables nuevos modelos de negocio en el ámbito de internet, situación que se ha visto consolidada en los últimos dos años debido a la incidencia de la pandemia de Covid-19. Una de estas fórmulas novedosas es el dropshipping, cuya proliferación ha ido en aumento desde mediados de 2020.

Aunque la esencia del dropshipping es la misma que la del comercio electrónico, las características específicas de esta modalidad obligan a los autónomos a enfrentarse a compraventas intracomunitarias e internacionales con clientes y proveedores, lo que en muchos casos obligará a que los productos pasen por aduanas y se vean sometidos a unos procedimientos fiscales específicos”, detalla Marta Zaragozá, CEO de Declarando.



Alta en la Seguridad Social y en el IAE

Al igual que sucede en cualquier actividad que se pretenda desarrollar por cuenta propia, las personas que quieran dar salida a un negocio de dropshipping deberán cursar su alta en el RETA, que es el régimen de la Seguridad Social que acoge a los trabajadores autónomos. Es importante recordar que este alta sólo será obligatoria en el caso de que la actividad facture 10.800 euros al año o más.

Lo que sí será obligatorio para poder emitir facturas, será estar dado de alta en el fisco a través del Impuesto de Actividades Económicas. En este sentido, antes de elegir el epígrafe correspondiente para el alta (que será siempre alguno del apartado de comerciantes, es decir, de los grupos 5 o 6), es importante asegurarse de que el comercio cumple una serie de requisitos que son necesarios para poder considerarlo dropshipping. Estos son:

  • Tener tienda propia: la venta de los productos comercializados debe ser desde una web propia donde estén expuestos y los clientes puedan comprarlos.
  • No almacenar: es importante que el almacenaje de los productos lo desarrolle un tercero, generalmente el proveedor al que el autónomo compra el producto.
  • Recibir el cobro: el autónomo responsable del comercio será quien reciba el pago final y completo del producto. No es dropshipping si solo se recibe un porcentaje o una comisión.
  • No enviar los productos: en el dropshipping el encargado de enviar los productos al cliente final es el proveedor.

¿Cómo se liquida el IVA del dropshipping?

Hasta ahora, los comercios de dropshipping operaban con productos de proveedores no comunitarios, como China o EE.UU., cuyo valor no supera los 22€ para que fuesen categorizados como productos de escaso valor y quedan exentos de IVA a la importación. Sin embargo, desde el 1 de julio de 2021, con el objetivo de regularizar las importaciones de este tipo de negocios, el importador deberá liquidar el IVA independientemente del valor del producto, para lo que existen diferentes alternativas.

Ventanilla Única de Importación (IOSS)

Con el objetivo de facilitar el pago del IVA y evitar otros trámites derivados de la importación, como la aduana o la presentación de modelos adicionales, Hacienda ha creado la Ventanilla Única de Importación (IOSS). Se trata de un sistema en el que los negocios inscritos sustituyen al cliente final como importador y obtienen el beneficio de la exención de IVA cuando los productos no superan los 150 euros.

Al inscribirse en el IOSS, el autónomo puede ofrecer al cliente final un precio cerrado, sin cargos adicionales, en sus productos. De lo contrario, será el cliente quien asuma el rol de importador y verá incrementada la factura final con respecto al precio que marque la web donde ha comprado, puesto que se le aplicarán los recargos correspondientes a la liquidación del IVA”, explica Marta Zaragozá. “El único requisito para poder registrarse en el IOSS es que el precio de los productos que se ofrecen no supere los 150 euros”, añade.

Liquidación del IVA a la importación en aduanas

Si el valor de los productos importados supera la cuantía antes indicada (150 euros), será necesario liquidar el IVA en la aduana. Se trata de un procedimiento que se ejecuta a través de la llamada carta de pago que acompaña al modelo 031 expedido por la Administración aduanera.

El documento en cuestión sirve para declarar una importación o exportación ante las autoridades aduaneras, dando información sobre el producto y siendo la base para la futura declaración tributaria. Esta liquidación del IVA de importación, junto con los aranceles, es uno de los requisitos para poder retirar los productos de la aduana e introducirlos en España.

Alta en el ROI para compraventas en el territorio de la UE

Para aquellos autónomos con negocios de dropshipping que realicen operaciones de compraventa fuera de España, pero dentro de la UE, será obligatorio estar dado de alta en el ROI (Régimen de Operadores Intracomunitarios), que es el censo de profesionales y empresas para poder comerciar con las normas del IVA intracomunitario.

Las obligaciones que se derivan de éste régimen son la presentación anual del modelo 309, que hace referencia a las compras a proveedores europeos, además de la liquidación de IVA bien a través de la ventanilla única o de los agentes recaudadores de hacienda, como la aduana.

Recargo de equivalencia en dropshipping

Los autónomos dados de alta en el ROI están exentos de presentar el modelo 303 de IVA, al igual que los dropshipper. Sin embargo, las características del negocio hacen muy probable que todos los trabajadores que lo desarrollan deban darse de alta en el régimen de recargo de equivalencia, ya que las condiciones para ello son que el 80% de los clientes sean particulares, que no se modifiquen los productos vendidos y que el autónomo no tribute por módulos.

De esta forma, al contrario que el resto de autónomos, las obligaciones fiscales que estos trabajadores tendrán con Hacienda será las siguientes:

  • Será obligatorio pagar un recargo a Hacienda por cada compra en función del tipo de IVA aplicado a los productos.
  • Los autónomos inscritos en el régimen de recargo de equivalencia están exentos de presentar las liquidaciones trimestrales de IVA.
  • Dentro de este régimen no es obligatorio emitir facturas de venta a los clientes ni tener un libro de registro de ingresos.

Muy Pymes

LucusHost, el mejor hosting

Deja una respuesta